joaquinperezartesaniabelenista

Mi despertar fue como todos los días. ¡ Carmen levántate para que ayudes a tu papá ! uuuufff. Las seis de la mañana y me tocaba a mi el trabajito. Había que estar dos horas colocándole el pan crudo en la larga pala, que el rabioso de mi padre metía al horno caliente. El tenía que actuar con absoluta precisión, porque había que hacer caber la mayor cantidad de allullas posibles. Le rogaba a Dios que su mano actuara segura, que por nada del mundo fuera a colocar la pala en el lugar no debido. Si por casualidad, cometía un error al colocar el pan,,,, salían de la boquita de mi papacito, unos garabatos que nunca más le he escudo a persona alguna. ¡¡¡ POR LAS RESIETEMILCHUCHAS QUE SOY BOQUIABIERTO !!!! Mira como monté un pan arriba del otro. Lo malo que ya no había arreglo posible. Ese día nos tocaba comer pan doble, porque ni modo de venderlo. Quedaba para el consumo de la casa. Descansaba cuando terminábamos de echar el pan,,,, después, tapábamos el horno y esperábamos a que se cociera. Una vez listo, lo colocábamos en grandes canastos, de donde otra a de mis hermanas vendía. Era tres o cuatro hornadas las que hacíamos todos los días. Mi mamá mientras tanto, preparaba el desayuno, levantaba a los demás chiquillos y cuando finalizaba nuestra tarea, nos íbamos a la cocina donde esperaba el inmenso brasero con tetera, lechero y todo lo necesario para nuestro primer alimento del día. Era contundente, ulpo primero, después podíamos tomar un tecito. Las que estábamos en la escuela, partir apuraditas, porque el recorrido era largo, más de cuatro kilómetros a patita nomás. De Lunes a Sábado. Esa es la razón por la que me causan risa las personas que rezongaban por tener que caminar una cuadra para esperar el vilipendiado TRANSANTIAGO. En el verano la cosa era diferente,,,, como no había escuelas, alargabamos el desayuno hasta que mi mamá decía,,,, ya,,, cada una a hacer sus cosas y ella, tomandose las puntas del delantal, lo llenaba del trigo que sacaba de un cajón y se iba al patio:::: TIQUITIQUITIIIIIII,,,, llamaba a las gallinas que llegaban cacareando con sus parvadas de pollitos. Mientras picoteaban en el suelo, mi Santa Madre pillaba a alguna polla y con cuatro dedos tanteaba por si estaba lista para poner, no fuera cosa que se pusiera a armar nido por ahí le comieran los huevos los perros.

Hace tantos años de los famosos y molestos toques de queda. Cuando aun era Presidente el DR. Salvador Allende G. yo tenía, mi criadero de patos. Había una tremenda escasés de TODO. Paros…porque sí…paros porque nó. Un despelote total. A veces no podía salir de Peñaflor, para hacer mis entregas en los Almac y Unicoop, los supermercados de la época….Pero como yo era joven y medio patuda, tiraba la camioneta encima nomás, aunque me tapaban a piedrazos. Era como un chiste, pura gente conocida, eran los Batinos, que tb. pasaban en huelga. Eso era en Malloco, después venía la pasada por el Cordón Cerrillos, otra odisea poder entrar a Santiago….. Había que hacer toda una estrategia para llevar los pedidos de patos. Lo terrible era conseguir los repuestos para los vehiculos. Un día…Chamullo…un maestro eléctrico, nos dijo que tenía alguien que nos podía vender silvines ( focos) ya poooohh…vamos a buscarlos!!!!! yo dejé mi camioneta y nos fuimos en el Austin mini de mi Bienamado….Manolo, Chamullo , Jorge y yo…. Fuismo a la casa donde supuestamente estaban los silvines….. No estaba el que tenia los repuestos, pero el amigo de Chamullo, nos sirvió unos vasos de Pisco y después sacó una botella de cognac….como hacía mucho frio yo también tomé….pero nuestro amigo eléctrico se tomó mas de media botella solo……¡¡¡ ya estaba medio cocido !!!! Quedamos en que iriamos al día siguiente. Por efecto del alcohol, nos bajaron las ganas de bailar y empezamos a cantar los 4…. pura música cubana…..(estaba se super moda Cuba) A Chamullito, que era re-bueno pal copete ya se le había calentado el hocico, como se dice en el campo. En El Monte….a 40 kms. de Peñaflor, había un negocio de una sra. que se llamaba Charito, donde había niñas pa que atiendan a los hombres, no era casa de P… sino solo para bailar. Todas las despedidas de soltero de Talagante y Peñaflor, terminaban siempre donde la Charito. Chamullo, se le ocurrió que lo fueramos a dejar allá. No…¡¡¡no ves que hay toque de queda!!!! Era a fines de Agosto de 1973, (último toque de queda de Allende) y ya eran las 10 de la noche y el toque era a las 11 ….no…no alcanzamos a llegar de vuelta….Pero el complicado de Chamullo, que estaba enamorado de una de las niñas de la Charito, se montó en el macho y nos amenazó con no conseguirnos los silvines si no lo ibamos a dejar. ¡¡¡ Obligados !!! Fuimos donde la Charito, estaba cerrado….ni una sola luz…..Nuestro enamorado amigo, golpeó las cortinas metálicas…. pero nada. Y ahí estabamos los taraditos siendo las 22.50 en El Monte, 4 huev… medio curados por el pisco consumido y a punto de que empezara el Toque ….. cantando a todo pulmón La Guantanamera…. Yo la mente brillante, les dije, mejor vamonos por el camino del Diablo, (callejón que une Talagante con Peñaflor) jajajaajjjjj No recordaba que ahí mismo está el Polvorín de los Milicos. Ibamos entrando al Camino de Lucifer…..cuando aparecen los Militares…..nos pusieron con las manitos apoyadas en el auto y nos revisaron…..Cuando lo hicieron conmigo, me les bote a chistosa y les empezé a mover las caderas, tarareando la Guantanamera…..¡¡¡¡ casi me pegó el milico !!!! Nos entregaron en la Comisaria de Talagante, donde había un Sargento muy enojado. dejaron sentados en la guardia y mi bienamado decidió llamar al pelao Leiva….Juez de policia Local de Peñaflor…..con su lengua medio estropajosa por el traguito….le explicó lo que nos pasaba. El Sr. Juez habló con el Sargento y después de nuevo con Jorge….Dijo quedense ahí nomás, porque si se van igual los va a encontrar otra patrulla y los van a volver a detener….. Nos metieron en una celda los hombre y yo…..solita nomás. Me cagué de frio. A las 6 de la mañana nos dejaron ir….pero teníamos que ir al Juzgado una semana después. Pa que decir, como estaban de enojada las mujeres de mis amigos. casi les pegaron, tuvimos que mi bienamado y yo dar las explicacionbes justificando a los brevas. El Lunes siguiente en la tarde fuimos al Juzgado, pero el Pelao Leiva se encargó de todo el trámite ….Una vez pagada la multa….como una forma de vengarnos de la justicia cantando de nuevo la guantanamera nos fuimos los cuatro donde la Charito….. No estaba ella….pero a cargo del negocio había una ahijada….¡¡¡¡en buena hora!!!! ….. Porque la encargada se enamoró de Manolo y como a las 12 de noche nos agazajó con una rica cazuela de ave. Pareciamos trompitos bailando….volvimos a las casas a las 6 de la mañana, pero esta vez las mujeres de Chamullo y Manolo habíanb autorizado la salida.